
Del baile del loco* extraje curas imposibles,
en mi trono no hay quien descanse,
demasiados lagartos en el primer escalón,
el cojín lo devoraron las envidias,
la corona la raptaron los conversos.
He creado una nueva danza...
sígueme, cierra los ojos
y repulsa los espejos,
pues aquel que implora reflejo
seguirá siendo preso de los veredictos.
Salí de mi ciudad hace mucho tiempo,
habito en mi mente,
quizás algún día regrese,
para entonces quiero estar preparado.
(*baile del loco: poema perteneciente a El Ojo,
simplemente un homenaje al Rey Lagarto...
no estás solo en esto)