
Reinventada la razón,
la condición es alterna al disparate
cuando posesión es carcoma silenciosa,
las tumbas del convencimiento son ciegas
en los altares del desahogo,
arena y piedras en el vendaval
que escupe sus mal pasos,
alzados en el error más dopado;
el de querer inventar verdades
con pretensiones lisiadas
para la caricia que ya no sabe a nada,
la apropiación siempre será incoherente
mientras se juzguen las estancias,
unos se excusarán en los celos
y otros maldecirán al destino.