
Soles grises en las luces impuestas,
claridades paridas en molestia,
antes que hombre diurno seré bestia,
si el día no juega, tú Noche apuestas,
pues de los astros sólo quiero puestas,
habitante de penumbras, modestia;
a los curas devolveré su ostia,
sólo Poesía cielos me prestas.
Ciudadano soy del negro brillante
con más alergia al claro que al oscuro
desde estrellas a sencillas piedras.
Vengo del opaco de ciego muro,
mi repulsa es jinete con talante
para amaneceres y sus yedras.
(Agradecimientos a Lola Pastor y Eloy Díaz por su colaboración)